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» 📈 Cómo un Growth Advisor impacta el crecimiento del negocio
» Etapas donde un Growth Advisor aporta más valor
» Frameworks comunes utilizados por Growth Advisors
» 🔧 Herramientas que utilizan los Growth Advisors
» Retos a los que se enfrentan los Growth Advisors
» 🎯Cómo elegir al Growth Advisor adecuado
» ✅ Casos reales de éxito de Growth Advisors
En el mundo de las startups, escalar un negocio va mucho más allá de tener un buen producto o levantar inversión. Ahí es donde entra el Growth Advisor: un perfil estratégico que acompaña a los fundadores en los momentos clave del crecimiento, ayudando a priorizar, enfocar y escalar con inteligencia.
No es un empleado ni un consultor tradicional: es un aliado con experiencia real, que ya ha vivido el camino y sabe cómo evitar errores, desbloquear cuellos de botella y acelerar resultados sin perder el rumbo.
Toda startup llega a un punto donde el esfuerzo ya no es suficiente. Puedes lanzar anuncios en Facebook, enviar mil correos fríos o ajustar tu landing page, pero sin una estrategia clara de crecimiento, es probable que quemes presupuesto sin lograr tracción real. Ahí es donde entra el Growth Advisor.
✅ Guía estratégica:
Un Growth Advisor ve el panorama completo. Mientras los equipos internos se obsesionan con botones o CTRs, el advisor evalúa todo el embudo —desde adquisición y retención hasta monetización— y traza un roadmap alineado con tus objetivos de negocio.
✅Expertise en escalabilidad:
Ayudan a las empresas a evitar caer en la "trampa de las tácticas". En lugar de perseguir el último growth hack, diseñan sistemas y frameworks que se consolidan con el tiempo. Traen experiencia previa en startups y saben qué funciona y qué no en cada etapa de crecimiento.
✅ Apoyo al fundador:
Construir una empresa puede ser solitario. Los Growth Advisors muchas veces se convierten en confidentes de los fundadores, ayudándoles a priorizar, prepararse para reuniones con inversores o gestionar dinámicas internas. No son solo tácticos, son aliados estratégicos.
✅ Evitar errores costosos:
Al apoyarte en alguien que ya ha recorrido ese camino, puedes saltarte curvas de aprendizaje dolorosas. Desde elegir el stack de marketing correcto hasta evitar una mala contratación, un Growth Advisor te ayuda a esquivar minas.
Las startups operan en entornos de alto riesgo, donde hay poco margen para fallar. Un Growth Advisor aporta estabilidad y visión estratégica para crecer con seguridad y sostenibilidad.
A diferencia de los empleados a tiempo completo, que están inmersos en la ejecución, un Growth Advisor trabaja desde una perspectiva más elevada: aporta claridad, enfoque y potencia estratégica. ¿Pero en qué se traduce esto en la práctica?
✔️ Diagnóstico de crecimiento: Primero evalúan en qué punto estás. ¿Tienes problemas de retención? ¿Tu Coste por Adquisición de Cliente (CAC) es demasiado alto? ¿Tu funnel de ventas no convierte? Analizan datos, hacen preguntas clave e identifican lo que te está frenando.
✔️ Planificación estratégica: Con base en ese diagnóstico, crean una estrategia de crecimiento personalizada. Puede incluir optimizar el go-to-market, redefinir tu posicionamiento o sugerir nuevos canales de distribución. Alinean al equipo con las tácticas y objetivos adecuados.
✔️ Coaching y mentoría: Los buenos advisors no solo dan respuestas, enseñan a pensar. Acompañan a líderes de marketing, entrenan a equipos de ventas y trabajan con los fundadores para mejorar su liderazgo y toma de decisiones.
✔️ Activación de red: ¿Necesitas un experto en PPC? ¿Alguien que escaló un SaaS B2B? Los Growth Advisors abren puertas a talento, herramientas y alianzas a las que, de otra forma, sería difícil acceder.
✔️ Seguimiento y adaptación continua: No entregan una estrategia y desaparecen. Hacen seguimiento regular, ayudan a revisar KPIs y ajustan el plan según lo que funciona (o no). Es una relación dinámica, no un servicio puntual.
Su norte: crecimiento sostenible y escalable, adaptado al contexto único de cada negocio
Estos términos a menudo se usan indistintamente, pero cada rol aporta un valor diferente:
Growth Advisors: guían a fundadores o líderes de crecimiento, evitando errores comunes y aportando visión.
Growth Consultants: se contratan por proyecto para resolver un problema específico (como mejorar tasas de conversión o lanzar un nuevo producto).
Growth Operators: están integrados en el equipo, liderando experimentos, herramientas y ejecución diaria.
¿Cuándo contratar a cada uno?
Si necesitas un socio estratégico continuo: Growth Advisor
Si necesitas resolver un cuello de botella puntual: Growth Consultant
Si quieres alguien que se encargue de ejecutar: Growth Operator
Entender la diferencia te ayudará a construir el equipo de crecimiento adecuado para tu negocio.
No todos los advisors son iguales. Los mejores aportan experiencia, pero también claridad, confianza y agilidad estratégica. Estas son las cualidades esenciales:
Trayectoria comprobada: Necesitas a alguien que ya haya estado en la trinchera. Idealmente, que haya ayudado a empresas similares a escalar. Busca evidencia de éxito en diferentes industrias y modelos de negocio.
Pensamiento estratégico: No se pierden en los detalles. Conectan puntos que otros no ven, alinean iniciativas de crecimiento con los objetivos globales del negocio y piensan varios pasos adelante.
Decisiones basadas en datos: Saben cómo interpretar información, hacer las preguntas correctas y usar insights reales para guiar estrategias. No se basan en corazonadas.
Gran capacidad de comunicación: Deben poder explicar ideas complejas de forma simple. Ya sea hablando con un fundador o asesorando a un marketer junior, la claridad es fundamental.
Empatía y escucha activa: Los mejores no solo hablan, escuchan. Quieren entender a tu equipo, tu producto y tus usuarios antes de hacer recomendaciones.
Fuerza de red: Un Growth Advisor con experiencia trae consigo una red de talento, socios y colaboradores que pueden acelerar tu crecimiento y abrir nuevas oportunidades.
En resumen, un buen Growth Advisor es un multiplicador. Eleva la ejecución, el pensamiento y la ambición de todos los que lo rodean.
Contratar a un Growth Advisor puede parecer un lujo al principio, especialmente para startups en etapas tempranas. Pero los resultados que generan suelen justificar su valor en muy poco tiempo. ¿Cómo? Aportando impacto en múltiples niveles del negocio:
☑️ Alineación de esfuerzos
Uno de los problemas más comunes en startups es que los equipos trabajan en silos, cada uno con sus propias métricas y objetivos. El Growth Advisor llega para unificar todo eso. Ayuda a definir objetivos comunes y alinear marketing, producto y ventas bajo una misma estrategia de crecimiento.
☑️ Enfoque en resultados
Mientras algunos roles se concentran en tareas o entregables, el Growth Advisor trabaja con KPIs claros: crecimiento en usuarios, ingresos, retención, etc. Su enfoque es práctico y orientado al rendimiento.
☑️ Optimización de recursos
No se trata de gastar más, sino de gastar mejor. Un buen Growth Advisor puede identificar campañas ineficientes, recomendar herramientas más adecuadas o ayudarte a renegociar con proveedores. En muchos casos, su asesoría resulta en ahorros inmediatos.
☑️ Activación de nuevos canales
¿Estás dependiendo solo de publicidad paga? ¿Tu contenido no genera tracción? El Growth Advisor tiene experiencia probando múltiples canales: SEO, PR, partnerships, producto como canal, etc. Puede ayudarte a descubrir rutas de crecimiento que nunca habías considerado.
☑️ Mejora en la toma de decisiones
Gracias a su experiencia y mirada externa, puede ayudarte a evitar errores comunes: contratar al perfil equivocado, lanzar una funcionalidad que no aporta valor, invertir en una campaña sin retorno, etc...
En resumen, su impacto va más allá de la estrategia. Es alguien que genera movimiento, desbloquea el estancamiento y transforma equipos en motores de crecimiento constantes.
No todas las etapas de una empresa necesitan el mismo tipo de acompañamiento. Pero hay ciertos momentos clave en los que un Growth Advisor puede marcar la diferencia:
1️⃣ Etapa Pre-Seed y Seed
En estas fases, los fundadores están enfocados en validar el producto, conseguir los primeros usuarios y asegurar inversión inicial. Aquí el Growth Advisor:
Ayuda a definir una propuesta de valor clara.
Sugiere canales de adquisición baratos y efectivos.
Contribuye a validar el Product-Market Fit más rápidamente.
2️⃣ De Series A a Series B
Cuando el producto ya ha sido validado y comienza la escalabilidad, los retos cambian:
Hay que estructurar equipos de marketing y ventas.
Se necesita un modelo de adquisición más robusto.
Comienzan a aparecer problemas de retención.
Un Growth Advisor en esta etapa actúa como arquitecto del sistema de crecimiento, ayudando a escalar sin perder la esencia del producto.
3️⃣ Expansión y madurez
Incluso las empresas más consolidadas se estancan. Aquí, un Growth Advisor puede:
Identificar nuevas líneas de negocio.
Evaluar internacionalización o nuevas audiencias.
Optimizar unit economics y eficiencia operativa.
4️⃣ Fase de turnaround
Cuando una empresa necesita reinventarse, ya sea por crisis interna o externa, el Growth Advisor ayuda a reestructurar estrategias, priorizar recursos y volver a la senda del crecimiento.
Cada etapa tiene sus propios desafíos. El Growth Advisor no solo ayuda a enfrentarlos, sino a anticiparse a ellos.
Los Growth Advisors no improvisan. Utilizan frameworks comprobados para analizar, estructurar y ejecutar estrategias de crecimiento de forma sistemática. Aquí te presento los más comunes:
Lean Startup
Este método de Eric Ries es la base para validar ideas con rapidez y eficiencia. Se centra en construir, medir y aprender con el menor gasto posible. Los Growth Advisors lo aplican para lanzar experimentos, validar mensajes y evitar desarrollar funcionalidades innecesarias.
Pirate Metrics (AARRR)
Popularizado por Dave McClure, divide el embudo de crecimiento en:
Acquisition: ¿Cómo llegan los usuarios?
Activation: ¿Están teniendo una buena primera experiencia?
Retention: ¿Vuelven al producto?
Revenue: ¿Están pagando?
Referral: ¿Recomiendan el producto?
Este marco ayuda al advisor a detectar cuellos de botella y priorizar acciones con mayor impacto.
OKRs (Objectives and Key Results)
Muchos Growth Advisors ayudan a los equipos a trabajar con OKRs para enfocar esfuerzos y alinear a todos hacia los mismos objetivos. Es ideal para estructurar ciclos trimestrales de crecimiento.
North Star Metric
Cada negocio tiene una métrica clave que representa el valor entregado al usuario. Puede ser “número de conversaciones” en una app de mensajería o “viajes completados” en una plataforma de movilidad. El Growth Advisor te ayuda a identificarla y enfocar todas las acciones en aumentarla.
ICE y RICE Scoring
A la hora de priorizar iniciativas, estos modelos permiten puntuar ideas según Impacto, Confianza y Facilidad (ICE) o Reach, Impact, Confidence y Effort (RICE). Así se toman decisiones objetivas y se ejecuta con velocidad.
Aunque su foco es estratégico, un buen Growth Advisor también domina el stack de herramientas necesario para ejecutar sus ideas o guiar al equipo en su implementación. Aquí algunas de las más utilizadas:
Herramientas de analítica
Google Analytics / GA4
Mixpanel / Amplitude
Hotjar / Clarity
CRM y automatización
HubSpot / Salesforce
ActiveCampaign / Mailchimp / Customer.io
Herramientas de experimentación
Google Optimize / VWO / Optimizely
LaunchDarkly / Split.io
Business Intelligence
Looker / Tableau / Metabase
BigQuery / Redshift
Colaboración y gestión
Notion / Trello / Asana
Slack + Zapier
Un buen Growth Advisor no solo recomienda herramientas, sino que también ayuda a configurarlas, conectarlas y sacarles el máximo provecho. La tecnología es el acelerador, pero la estrategia sigue siendo el volante.
Aunque ser Growth Advisor parece glamoroso, también es un rol con desafíos importantes que requieren habilidades de liderazgo, diplomacia y resiliencia:
Alinear la visión del fundador con la realidad del mercado
Muchos fundadores tienen una idea romántica de su producto. El advisor debe equilibrar esa visión con datos duros, validaciones del mercado y feedback de usuarios, sin generar fricción.
Navegar resistencia interna
No todos los equipos están listos para cambiar. Algunas áreas pueden sentir que un Growth Advisor viene a “decirles cómo hacer su trabajo”. El éxito depende de su habilidad para construir confianza y generar colaboración.
Lograr resultados sin ejecución directa
A diferencia de un operador, el advisor no ejecuta. Tiene que influir y motivar a otros a implementar sus ideas. Esto requiere liderazgo sin autoridad formal.
Medir su propio impacto
El valor que entrega puede ser intangible a corto plazo. Por eso, establecer KPIs claros desde el inicio es clave para evaluar su aporte y justificar su continuidad.
Mantenerse actualizado
El entorno digital cambia cada semana. Un Growth Advisor efectivo debe seguir aprendiendo constantemente para ofrecer consejos relevantes y actuales.
Elegir un Growth Advisor puede marcar la diferencia entre estancarse o escalar de manera consistente. Pero, ¿cómo saber si estás eligiendo al adecuado? Aquí te doy una guía para hacerlo con confianza:
Evalúa su experiencia relevante ✔️
No todos los advisors sirven para todos los negocios. Asegúrate de que haya trabajado con empresas de tamaño similar, en tu misma industria o con modelos de negocio parecidos (B2B, SaaS, DTC, etc.). Pregunta por casos concretos, métricas alcanzadas y cómo enfrentó desafíos similares a los tuyos.
Pide referencias ✔️
Un buen advisor tiene clientes felices que estarán dispuestos a hablar. No te conformes con testimonios escritos: pide conversar con uno o dos fundadores con los que haya trabajado antes.
Detecta red flags ✔️
Vende fórmulas genéricas que suenan bien pero no se adaptan a tu contexto.
Habla más de herramientas que de estrategia.
No hace preguntas profundas sobre tu negocio.
Promete resultados inmediatos sin diagnóstico previo.
Evalúa su mentalidad ✔️
Más allá de los resultados, importa cómo piensa. ¿Está enfocado en el usuario? ¿Tiene una mentalidad experimental? ¿Te hace sentir acompañado o te deja más dudas?
Preguntas que deberías hacerle ✔️
¿Cuál es tu enfoque cuando un producto aún no encuentra PMF?
¿Cómo priorizas entre adquisición, retención y monetización?
¿Cómo trabajas con equipos internos sin ser parte del staff?
¿Cómo defines el éxito en un proceso de growth advisory?
Evalúa la química personal ✔️
No subestimes la importancia del feeling. Vas a trabajar codo a codo con esta persona, probablemente compartiendo dudas estratégicas, problemas de liderazgo y decisiones críticas. Debes sentirte cómodo, entendido y desafiado.
Elegir bien puede transformarte. Elegir mal puede costarte tiempo, dinero y oportunidades de crecimiento.
Las mejores formas de entender el valor de un Growth Advisor es a través de ejemplos reales. Aquí dos casos donde el asesoramiento estratégico marcó la diferencia:
Caso 1: SaaS B2B que triplicó su MRR
Una startup de software para equipos de ventas había llegado a un techo. Sus anuncios en Google eran caros, y las campañas de outbound no convertían. El Growth Advisor diagnosticó dos cosas clave: falta de diferenciación en su mensaje y una estrategia débil de contenido.
Con su guía:
Redefinieron el posicionamiento basado en “jobs to be done”.
Lanzaron un blog con artículos específicos para distintos segmentos.
Activaron un canal de partnerships que trajo leads de calidad.
📈 Resultado: en 8 meses, pasaron de $20K a $65K en MRR y disminuyeron el CAC en un 40%.
Caso 2: App de consumo masivo que multiplicó usuarios por 10
Una app de finanzas personales tenía buena retención, pero no crecía. Su Growth Advisor les ayudó a:
Implementar experimentos en canales de referidos.
Mejorar el onboarding y la activación en los primeros 5 minutos.
A/B testear la propuesta de valor en App Store.
📈 Resultado: multiplicaron su base de usuarios por 10 en 12 meses y fueron adquiridos por una fintech regional más grande.
Estos ejemplos demuestran que el acompañamiento estratégico correcto puede abrir puertas que antes parecían cerradas.
Tener un buen Growth Advisor no es suficiente. También necesitas saber cómo sacarle el máximo provecho. Aquí algunas recomendaciones para construir una relación de alto impacto:
Define objetivos desde el inicio ✅
No esperes que el advisor adivine lo que necesitas. Comparte tus metas, desafíos actuales y prioridades. Establezcan KPIs claros desde la semana uno.
Compromiso mutuo ✅
Un buen Growth Advisor no hace magia. Requiere colaboración activa, acceso a datos y disponibilidad para reuniones estratégicas. El compromiso debe venir de ambos lados.
Documenta y mide ✅
Utiliza herramientas como Notion o Google Docs para registrar ideas, planes, experimentos y resultados. Así evitas repetir aprendizajes y haces seguimiento a lo que funciona.
Retroalimentación continua ✅
Haz reuniones regulares (semanales o quincenales) para revisar avances. No tengas miedo de decir lo que funciona y lo que no. La mejora continua se basa en la comunicación abierta.
Involucra al equipo ✅
No lo hagas tú solo. Si tu equipo de marketing, ventas o producto no participa del proceso, estarás perdiendo valor. Involucra a las personas clave para que se alineen con la visión del Growth Advisor.
Una relación efectiva con tu advisor puede acelerar tu curva de aprendizaje, aumentar la moral del equipo y generar resultados sostenibles a largo plazo.
El rol del Growth Advisor está evolucionando rápidamente, al ritmo del ecosistema digital. Estas son las tendencias que están definiendo el futuro:
▷ Roles fraccionales y remotos
Cada vez más startups optan por advisors part-time o por horas. Esto permite tener acceso a talento de primer nivel sin necesidad de contrataciones full-time costosas.
▷ Growth-as-a-Service
Algunos advisors están creando modelos escalables donde ofrecen crecimiento como servicio: desde auditorías, hasta estrategias completas mensuales, adaptándose al ritmo del negocio.
▷ IA como co-piloto
Los Growth Advisors modernos usan inteligencia artificial para:
Automatizar reportes.
Identificar patrones en grandes volúmenes de datos.
Sugerir experimentos basados en machine learning.
Esto no reemplaza la estrategia humana, pero la potencia.
▷ Más foco en impacto social
Advisors están comenzando a enfocarse en startups con propósito: salud, educación, sostenibilidad. Buscan crecimiento, sí, pero con impacto positivo en el mundo.
▷ Comunidad y educación
Muchos Growth Advisors están creando comunidades, cursos y contenido en Skool. Esto no solo amplifica su impacto, sino que ayuda a democratizar el conocimiento del crecimiento.
Lo que viene es un entorno más colaborativo, técnico y alineado con propósito. Y los Growth Advisors seguirán liderando esa evolución.
El growth advisor trabaja de forma más integral, conectando marketing, ventas y producto con visión estratégica y basada en datos.
Sí. El advisor no ejecuta, por lo que se requiere un equipo que pueda implementar sus recomendaciones.
Puede variar: desde proyectos de 3-6 meses hasta acompañamientos a largo plazo con sesiones mensuales o semanales.
Un mentor suele dar consejos generales. Un Growth Advisor se involucra en aspectos estratégicos y operativos con foco en resultados de negocio.
Sí. En etapas tempranas puede ayudarte a encontrar Product-Market Fit, validar hipótesis y definir una estrategia inicial.
Con KPIs claros desde el inicio: MRR, CAC, LTV, conversiones, retención. También mide la claridad estratégica y mejora del equipo.
Un Growth Advisor no es solo un mentor externo. Es una figura estratégica que puede transformar la dirección de tu empresa. Aporta claridad, experiencia y una visión externa que muchas veces los equipos internos no tienen por estar “demasiado dentro”.
Desde diseñar estrategias a acompañar en la ejecución, su impacto se nota en métricas, decisiones y en la madurez del equipo. Y en un mundo donde la velocidad y el foco son clave, tener a alguien que ya ha recorrido ese camino puede ser tu mejor ventaja competitiva.
Ya sea que estés comenzando, escalando o reinventándote, un Growth Advisor puede ayudarte a avanzar más rápido y con menos fricción. Porque no se trata solo de crecer, sino de crecer bien.